martes, 26 de mayo de 2009

MI AVENTURA DE SER MAESTRA

En mi vida la palabra Maestro (a), siempre ha dejado una huella determinante, guardo de algunos de ellos un valioso e imborrable recuerdo con respeto y gratitud; y de muchos otros un gran ejemplo a seguir... comento esto porque hace cinco años empecé a trabajar como docente en el nivel medio superior en el Colegio de Bachilleres de Baja California, y desde el primer momento que me paré frente a un grupo de jóvenes; encontré una nueva perspectiva en mi vida profesional: la enseñanza. El hecho de transmitir y facilitar a las nuevas generaciones el conocimiento, no sólo queda en eso, sino que se da una serie de procesos que, enriquece, fortalece a través de una empatía, la relación alumno-maestro.
El ejercicio docente no sólo lo percibo como una vocación sino como un compromiso de entrega, un compromiso que me lleva a predicar con el ejemplo, en este descubrir una actitud ávida de crecimiento intelectual, de entrega al estudio para obtener una formación integral. Son insuficientes los puntos que se mencionan para describir mi postura como docente, sin embargo; puedo decir que analizando mi labor diaria, hago uso de todos los recursos necesarios para cumplir con el objetivo, valiéndome de las herramientas que tenga pero dentro de éstas la más importante que considero es la humanística. Esto significa que el alumno no es número de lista, sino; una persona que siente, piensa y espera ser tomado en cuenta como tal. El respeto como un valor universal debe prevalecer en las interacciones que se viven dentro y fuera del aula. Darles a conocer una materia o un tema a los alumnos, no solamente es la explicación clara y coherente que deben guardar en su memoria, es la manera que les llega esa información, para que no sea tediosa debe ser atractiva y dinámica, para que quieran conocerla debe ser interesante y para obtener un aprendizaje significativo deben aplicar el conocimiento a su realidad. Todo esto se logra gracias a la disposición que tengo como maestra de atender mi trabajo. A la pasión que le pongo a la enseñanza y a la apertura que mantengo hacia la actualización y preparación para mejorarlo día a día.

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